dgarcia wrote: 24 Aug 2018, 19:13 -En cuanto a eso, me temo que no puedo ayudarle, por que siendo sincero, no me fió un carajo de usted. Después de lo que paso con Luchaman y Aproventel, se de muy buena mano hasta donde pueden llegar los tentáculos podridos de una corporación. Y no me extrañaría que usted fuese otro títere detrás de una mega compañia que quiere enriquecerse con nosotros (los aumentados).
-Así que hasta que no se gane mi confianza, utilizare cierta táctica política que consiste en repetir en bucle: "No me consta. No se de que me habla. No me consta. Lo desconozco. No me acuerdo. No me consta. Mire ya se lo he dicho, ese tema lo llevaba mi marido." Y todo esto aderezado con "la carita".

- Aprecio su valentía, señor García, pero está completamente equivocado. - apago el puro en un cenicero. El hedor a humo llena la estancia. - Mis intenciones no van más allá del típico temor de los seres humanos a lo desconocido. Quiero hacer el mundo un lugar mejor entendiendo en qué posición están los de su tipo respecto a los demás. - señalo el dossier de Iriina. - Pero si usted, o su amigo Ordúñez, no quieren echar una mano, lo entiendo. Una persona con un trasfondo policial, que hace demasiadas preguntas y que tiene un despacho en una comisaría no es la mejor combinación para la confianza.
Me sacudo la ceniza de los dedos y guardo la carpeta en mi archivador. Chasqueo la lengua.

- Son ustedes libres de irse. Pero si cambian de actitud, estoy abierto al diálogo. - dejo que se marchen, pero antes de que salgan por la puerta. Intento disimular que activo uno de los aparatos del Test de Shankar, pero es evidente que lo hago. - Una última cosa. El día del suceso en la Piscina cubierta, ¿la señorita Baez estaba con usted?
